sábado, 2 de marzo de 2024

Lulu, una tragedia monstruo

 



“Lulú: Una Tragedia Monstruo" nos sumerge en un torbellino de emociones que fusiona lo grotesco con lo sublime, lo trágico con lo cómico, en una experiencia teatral que desafía las convenciones del género. Inspirada en la obra transgresora de Frank Wedekind y enriquecida con elementos del circo, el cabaret y el teatro musical, esta producción dirigida por Cintia Miraglia ofrece una visión única y perturbadora de la figura de Lulú.

Desde el momento en que se levanta el telón, somos testigos de un espectáculo que desafía las normas del tiempo y el espacio, donde la ilusión y la realidad se entrelazan en una danza hipnótica. La presencia magnética de Iride Mockert como Lulú nos sumerge en un mundo donde la sensualidad es tanto una herramienta de poder como una maldición, donde cada gesto y cada mirada llevan consigo el peso de un destino trágico.

La dirección de Miraglia, inspirada en las formas actorales de Bob Fosse, crea una complicidad palpable con el público, llevándonos de la risa al estremecimiento en un abrir y cerrar de ojos. Los recursos mínimos se convierten en herramientas poderosas para narrar la historia, mientras que las canciones, interpretadas con maestría, añaden capas de significado a la trama.

En el corazón de la obra yace una crítica mordaz a la hipocresía de la sociedad burguesa, donde el deseo y la pasión son reprimidos en nombre de la moralidad. Lulú, con su insaciable sed de vida y su rechazo a la mediocridad, emerge como una figura trágica y monstruosa, cuya belleza es a la vez su perdición y su salvación.

El ambiente circense que envuelve la puesta en escena no solo sirve como marco estético, sino que también refleja la naturaleza ambivalente de Lulú, quien es tanto artista como espectáculo. Los personajes se convierten en operarios dentro de esta maquinaria teatral, donde la realidad se desdibuja y la representación se convierte en verdad.

En última instancia, "Lulú: Una Tragedia Monstruo" nos invita a cuestionar nuestras propias percepciones de la moralidad y la normalidad, desafiándonos a abrazar nuestra propia monstruosidad con valentía y determinación. Es un espectáculo que se queda grabado en la mente del espectador mucho después de que se apaguen las luces del escenario, recordándonos que, en última instancia, somos todos actores en el teatro de la vida, más en estos tiempos. ¡Para ver! (Meche Martínez)

 

Teatro Portón de Sánchez , Sánchez de Bustamante 1034. Sábados 20 hs


Autoría: Frank Wedekind

Adaptación: Cintia MiragliaMiguel Sorrentino

Actúan: Héctor BordoniCarlos LedragHoracio MarassiIride MockertCristian SabazMiguel Sorrentino

Diseño de vestuario: Paula Molina

Diseño de escenografía: Victor Salvatore

Realización de escenografia: Victor Salvatore

Realización de vestuario: Paula Molina

Música original: Carlos Ledrag

Letras de canciones: Cintia Miraglia

Técnico De Sonido: Matías DapenaEzequiel MorfiTitanio Studios

Diseño De Iluminación: Matias Noval

Fotografía: Cristian Holzmann

Comunicación: Marcos Mutuverría

Diseño gráfico: Cintia Miraglia

Asesoramiento en sonido: Matías DapenaEzequiel MorfiTitanio Studios

Asistencia de dirección: Ramiro García Zacarías

Prensa: Marcos Mutuverría

Community Manager: Pablito Lancone

Producción artística: Alejandra Garcia

Producción ejecutiva: Alejandra Garcia

Coreografía: Valeria Narvaez

Dirección musical: Carlos Ledrag

Dirección: Cintia Miraglia

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