Tiene esa magia este teatro, donde se puede reír, melancolizar
o aterrarse como es la historia que cuenta “El chico de la habitación azul”, escrita
por Miguel Angel Diani ,(gran referente y director de Argentores) y muy bien
interpretada por Amancay Espíndola, Hugo Men, Gabriel Nicola.
Sin dudas está muy bien reflejada la relación victima –
victimario, y se demuestra casi con diseño perfecto (mérito de su autor), esa
trama oscura, de una familia complicada, negadora y enferma, que con un humor negro absoluto,
deja pensando al espectador ante cada detalle.
La perversión y lo siniestro se muestra en esta obra que
plasma la locura en el camino, como un final inevitable. Los 65 minutos que
dura la pieza, nos lleva a una humorada tras otra absolutamente nerviosa, ya
que uno desea que esa creación nunca llegue a ser real, aunque se sabe que esto
ocurre tristemente.
Cuando la familia puede ser el ámbito de mayor caos, es el
titular de esta obra que demuestra el encierro de los personajes… Uno realmente
(Gabriel Nicola) y otros, aislados en su propias mentes (Amancay Espíndola y
Hugo Men). Los actores despliegan un talento maravilloso, y con ese guión sostenido, logran que la obra tenga sus grandes
momentos de brillo, aún en la oscuridad. Para ver. (Meche Martínez)
Actúan: Amancay Espíndola, Hugo Men, Gabriel Nicola
Vestuario: Agustin Justo
Yoshimoto
Escenografía: Agustin Justo
Yoshimoto
Diseño gráfico:
Agustin Justo
Yoshimoto
Asistencia de dirección:
Bea Apás
Prensa:
Giacani-Lauro
Comunicación
Producción
ejecutiva: Paola Gómez
Puesta en escena:
Enrique Dacal
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