La enamorada

Es una obra inmensamente risueña, llena de poesía y sutilezas, con música y canciones, y una mirada de la vida especial, soñada.

El empuje lo dio esa mujer pequeñita, Julieta Venegas, que entró a imaginar decir la palabra de Santiago Loza, ponerle música y ser dirigida por Guillermo Cacace. Hablará desde la verborragia que tenemos algunas mujeres, pero no dirá cualquier cosa, porque el texto es muy conmovedor y esa narrativa hace la diferencia. Un personaje que ha montado cubierto de ternura, se desdobla usando un hilo invisible que entreteje la niñez, la adolescencia y la juventud, contenida en un lenguaje simple pero muy amoroso.

Su productora Romina Chepe dijo en una entrevista que “la vida son buenos momentos y sin duda este es uno”, y yo agrego que la necesidad de asegurarse un buen momento teatral es ver “La enamorada”  en el Teatro El Picadero, reconocerán a una Julieta Venegas muy distinta, y esa mujer – actriz – cantante, se agradece en estos momentos, donde todo parece socialmente tan cuesta arriba.

De la niñez a la adultez, la niña no pide permiso, la adolescente se va por las ramas y la adulta conmueve, pero todas, todas son un personaje del que Julieta Venegas se encantó, subió a escena y se instaló en el corazón teatral con férrea conciencia. Enseguida entendió cómo dibujar la ficción, descalza, como la trajeron al mundo.

Cuando Guillermo Cacacce decidió dirigir “La enamorada” y Santiago Loza aceptó dar su palabra a la cantante, no sé si ambos imaginaron que frente a un escenario como el Picadero y “solita mi alma” tendría el público un huracán narrativo, que canta e interpreta tanto letras como dramaturgia de forma tan brillante y con una ternura tan sensible.

Julieta se deja llevar en andas por el arte que la acompaña y la música que la custodia, con secuencia plenas de color. Completan el lenguaje visual, simples filminas que se reproducen tras la artista.

Solo Loza puede lograr que uno imagine tan bien al hermano japonés, la nana que la amamantó y la empatía sobre esa mujer que se le murió el hijo. También hablará del hilo, de los pitucones y nos hará evocar todo el tiempo nuestra historia, esa que emociona, y no es lo mismo llorar de dolor, que de evocación. En esa horita volverán tus padres, tus abuelos, tus hermanos y tus amigos de ayer y de hoy, y ese tipo de dramaturgias son de puro valor humano y para atesorar por siempre.  

Julieta Venegas, en sus composiciones múltiples que hace con sus manitas en alto, su guitarrita y su mirada, en “La enamorada” nos enamorará a todos y agradecerás haberla visto al menos una vez. ¡Excelente!¡Para ver y volver a ver! (Meche Martínez) 

Julieta Venegas protagoniza este unipersonal escrito por Santiago Loza y dirigido por Guillermo Cacace que podrá verse a partir del 8 de agosto en el Teatro Picadero.
Un espectáculo en el que una mujer frágil e intensa toma la palabra y nos propone un viaje en el que seremos testigos de confesiones y relatos pequeños pero entrañables en el marco de un cuidado diálogo entre lo musical, lo poético y lo plástico.
Nunca sabremos si lo pudo decir todo. Pero "pudo decir" y este punto de inflexión en su vida marca claramente el abandono de una sumisión a la costumbre, a la inercia. Nuestra protagonista trata de hilar un relato que todo el tiempo se le deshilvana, pero el acontecimiento no está en lo hilvanado. El acontecimiento será poder presentarse frente a otros para operar un ritual ambiguo en el que lo que queda más claro es que muchas cosas han muerto y que tantas muertes han preparado el terreno para también morir en una identidad cuya fecha de vencimiento se ha puesto de manifiesto. Algo muere, algo nace. todo sucede sin estridencias. Se trata de un viaje en el que acompañaremos una intimidad, seremos testigos de confesiones de apariencia pueril y de contundencia existencial para un ser sin certezas, pero con la necesidad de encontrarse con el mundo desde un lugar otro
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Ficha técnico artística

Autoría:

Santiago Loza

Intérpretes:

Julieta Venegas

Diseño de vestuario:

Betiana Temkin

Diseño De Proyección:

Gisela Cukier, Johanna Wilhelm

Diseño de escenografía:

Johanna Wilhelm

Diseño de luces:

Matías Sendón

Canciones:

Santiago Loza, Julieta Venegas

Música original:

Julieta Venegas

Sonido:

Mariano Luna

Intervención Artística:

Andrés Molina

Fotografía:

Sol Levinas

Fotografía De Escena:

Francisco Castro Pizzo

Diseño gráfico:

Leandro Ibarra

Asistencia de escenografía:

Martina Nosetto

Asistencia de dirección:

Gabo Baigorria

Prensa:

Varas & Otero

Producción ejecutiva:

Romina Ciera

Dirección de Producción:

Romina Chepe

Dirección:

Guillermo Cacace

Duración: 60 minutos
Clasificaciones: Musical, Teatro, Unipersonales, Adultos

TEATRO EL PICADERO
Pasaje Santos Discepolo 1857 (mapa)
Capital Federal - Buenos Aires - ArgentinaTeléfonos: (+54 11) 5199 5793
Web: http://www.teatropicadero.com.ar/
Entrada: $ 800,00 - Jueves - 21:45 hs - Hasta el 30/11/2019
Entrada: $ 800,00 - Viernes - 22:00 hs - Hasta el 30/11/2019