Hace tiempo que vengo pensando en la estructura que el último tiempo tiene los Premios Ace para distinguir a los artistas que desarrollan su labor en el área teatral. Podemos reconocer que es muy difícil armar una forma justa de premiación, ya que la plaza argentina, es una de las más grandes y variadas en propuestas artísticas de todo el mundo. Hace años que ocurren estos errores de criterio para la elección. Pero como nunca es mi intención hablar sin aportar, voy a decir por ejemplo que no se puede premiar a “actriz o actor para un solo personaje”, sin hacerlo en dupla con el director o la directora, porque no hay unipersonal sin dirección. Y darles un diploma, es más humillante que reconocer el trabajo que es notablemente real para ese tipo de obras. Por eso de esta entrega, destacaré que sin Marcelo Moncaz, sin Horacio Peña, sin Ana Padilla, sin Pablo Di Paolo, sin Manuel Callau, sin Mariano Stolkiner, hubiera sido imposible que Eleonora Wexler, Marcela Ferradas, María Seghini, Zuleika Snal y Raquel Ameri, hubieran hecho trabajos tan hermosos… y sí es justo como dijo su director que la gran Raquel Ameri haya levantado por segunda vez la estatuilla.
La
conformidad no es buena cuando el trabajo es tan árduo y encima se pone tanto
esfuerzo para subir una historia que valga la oportunidad.
Pero hablemos
de los premiados justamente y tan merecido como los actores de “Laponia” Laura Oliva y Jorge Suárez, dos trabajadores
incansables, coherentes de principio a fin y con unas exposiciones tan bellas
que se los notó seres agradecidos. Esta obra la produjo el maravilloso Sebastian Blutrach, dueño del mágico
Picadero que es donde se desarrollan las funciones y teatro que también justamente
recibió su distinción aparte.
Patricia Etchegoyen sorprendida se llevó su galardón por “Inmaduros”,
pero alguien puede dudar de la genialidad de esta actriz? Muy merecido. Y la emoción
sin duda fue Elenita Petraglia
que ganó por “Stefano” a mejor actriz de teatro alternativa, tan íntegra como
ser humano y artista que además de aplaudir, muchos hemos sonreído felices. “Stefano”
fue dirigida por el gran Osmar Nuñez
que recibió su Ace por dirección, y porque es un artista tan brillante como
buena gente.
Carne de crítica 20 años es mucho, por Claudio
Pazos, Carlo Argento y Francisco Pesqueira, fueron elegidos como
Espectáculo de humor, y la elección fue certera, ya que este grupo teatral es
único e irrepetible gracias a dios, y todos podemos afirmar que el talento y el
encanto los une a este trío de hermosos muchachos lindos.
La verdad
los musicales importados me incomodan en la plaza teatral nacional, y los
nuestros, los admiro porque entiendo que hacer ese género es muy muy muy difícil,
porque siempre los fan andan mirando al norte y eso jode. Y el Oro de Pachano
se me hizo difícil de entender. Claro que era merecido UN GRAN RECONOCIMIENTO,
pero el Oro creo que debería tener más claridad en el concepto de entrega.
Fue hermosamente
merecido la distinción al Liceo y al
Picadero (Pica para los íntimos) que tanto queremos.
Sé que es difícil conformar
a todos, MUY DIFICIL, pero realmente con la calidad de artistas que tenemos, la
cantidad de propuestas teatrales, el esfuerzo que hacen las salas por encender
las luces, el trabajo de los elencos arriba y debajo del escenario, las
inversiones personajes y económicas que se realizan, las apuestas que TODOS
hacen por amor al teatro, MERECEN UNOS PREMIOS BIEN CLAROS, BIEN ESTIPULADOS,
BIEN TRANSPARENTES, Y RECONOCIMIENTOS AL NIVEL DE LO QUE SOMOS, LA PLAZA
TEATRAL MAS IMPORTANTE DEL MUNDO.
Me gustaría que los
premios no sean una caricia al ego, hay tanto, somos tanto que merecemos LO
MEJOR.
Mis palabras son
desde el Amor, por mi dedicación desde hace más de 30 años y con toda la intención
de seguir escribiendo las mejores páginas sobre NUESTRO TEATRO. (Meche Martinez)
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