lunes, 17 de marzo de 2025

Made in Lanús

 

El regreso de una historia que aún nos duele

Hay obras que no envejecen, que siguen latiendo con la misma intensidad que el día de su estreno. Made in Lanús es una de ellas. Esta versión evocativa nos transporta al año 1983, cuando la democracia asomaba en la Argentina y la posibilidad de volver al país era un privilegio reservado a unos pocos: los que habían podido irse, los que habían prosperado, los que aún estaban vivos… pero no solo vivos físicamente, sino despiertos, conscientes, cargando con una culpa tan honda como el exilio mismo.

Esa historia la conocemos todos, pero no podemos ni debemos olvidarla. Es la herida de una nación, el eco de la etapa más sangrienta de nuestra historia. Made in Lanús nos enfrenta con ese dolor y con la memoria de aquellos que se quedaron, resistiendo en silencio, y de aquellos que regresaron, intentando reencontrarse con un país que ya no era el mismo.

La primera vez que vi Made in Lanús fue hace casi 39 años, en 1986. Marta Bianchi, Leonor Manso, Patricio Contreras y Luis Brandoni le dieron vida a estos personajes con una intensidad que marcó a toda una generación. Luego llegó la versión cinematográfica de Juan José Jusid, que nos hizo vibrar y llorar con cada escena. Hoy, la Calle Corrientes nos ofrece una nueva puesta de esta obra histórica. Un elenco renovado, más joven, pero el mismo texto, la misma esencia. Y, sin embargo, verla hoy es un golpe en el pecho: la actualidad de sus palabras es escalofriante. Sentados en la butaca, nos retorcemos al reconocer en el presente los mismos conflictos, la misma lucha, la misma Argentina que no deja de debatirse entre la esperanza y la desilusión.

Diez años de exilio y el regreso… pero ¿quién vuelve realmente? ¿Cómo regresan Mabel y Osvaldo? ¿Y Yoly? ¿Y El Negro? Los que se quedaron, resistieron a su manera; los que partieron, intentan hallar su lugar en un país que, como siempre, parece moverse en círculos. Los gobiernos cambian, la miseria se recicla, pero hay algo inmutable: la pasión, la garra, la identidad de un pueblo que, a pesar de todo, sigue eligiendo creer.

En esta versión, Cecilia Dopazo construye una Mabel contenida, que camina entre la nostalgia y la incertidumbre. Esteban Meloni imprime en Osvaldo una sensibilidad que nos toca de cerca. Alberto Ajaka sostiene con firmeza el carácter de El Negro. Pero es Malena Solda quien nos deja sin aliento en la piel de Yoly. Su interpretación es un viaje en el tiempo, un puente que nos transporta al 86, a aquel dolor que nos laceraba, al mismo orgullo de ser argentinos que, con todas nuestras contradicciones, aún nos define.

La dramaturgia de Nelly Fernández Tiscornia nos habla de un país marcado por la dictadura y la guerra de Malvinas, pero también de la lucha permanente de los argentinos por encontrar su lugar en el mundo. Hoy, las batallas son otras, pero la esencia sigue siendo la misma. Volver a ver Made in Lanús no es solo un acto teatral. Es un deber de memoria, una caricia y una herida al mismo tiempo. Es un recordatorio de quiénes somos y por qué, pese a todo, seguimos eligiendo este suelo.

Ver Made in Lanús es necesario.  (Meche Martínez)


MADE IN LANUS
 

Miercoles a Viernes, 20:00 Hs Sabado, 19:30 Hs y 21:30 Hs Domingo, 19:30 Hs 

Multitabaris Comafi, Avda Corrientes 831, C.A.B.A.

 

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