sábado, 12 de julio de 2025

El sueño del bosque

 


Hay obras que nos sacuden con la fuerza de lo que ya sabíamos pero habíamos olvidado. Otras, en cambio, nos devuelven una intuición antigua, escondida entre la memoria de los vínculos, los silencios familiares y los fantasmas que heredamos. El sueño del bosque, esa delicada y feroz criatura escénica escrita por Lourdes Invierno y Javier Rodríguez Cano, pertenece a esta segunda especie: la del teatro que se parece al susurro de un secreto, de esos que nos despiertan a medianoche.

Ángela, la protagonista, no es princesa, ni heroína, ni mártir. Es violinista. Una mujer atravesada por la traición y el mandato, por la herencia y la ruina, por la muerte del padre y la herida de lo no dicho. Dueña y heredera de “El Reino”, una fábrica de pastas en la costa atlántica, Ángela se para en el umbral entre el pasado y el abismo, con una silla rota, su vestido de fiesta, una nube de harina suspendida en el aire, y un violín que no deja de llorar.

Lourdes Invierno —actriz y dramaturga— se entrega al texto como quien se ofrece al mar. Su cuerpo contiene la tensión del linaje shakesperiano sin necesidad de imposturas: ahí están el monólogo, la sombra, la culpa, la revelación, pero también el pulso íntimo de lo propio, ese que nos recuerda (salvando las distancias) a la emoción visceral de Imprenteros. Porque cuando lo familiar se convierte en materia dramática, cuando el dolor es transmutado en lenguaje poético, lo que aparece es la verdad más honda. Esa que, como Hamlet decía, está ahí, a la vista.

La dirección de Javier Rodríguez Cano sabe leer con sensibilidad ese territorio. No se impone, acompaña. Propone una puesta sobria pero cargada de símbolos: lo que está ausente, pesa. Lo que se nombra, sangra. Lo que se evoca, respira. Y en estos tiempos donde los monólogos proliferan —algunos más autobiográficos, otros más performáticos—, El sueño del bosque se inscribe con altura en una nueva ola donde la palabra confesional se vuelve un arma y un canto.

La obra vibra con esa poesía de lo mínimo: una mujer en escena, una historia que arde. Hay algo profundamente amoroso en el relato, no por edulcorado, sino por valiente. Porque hablar desde el centro de la herida requiere coraje. Porque vengar lo que nos hicieron (o lo que nos dejaron hacer) es, muchas veces, el único modo de seguir.

El sueño del bosque es eso: una plegaria, un acto de justicia poética, y una declaración de amor al teatro como último refugio de lo real. Uno sale conmovido, agradecido. Porque alguien, al fin, se animó a contar lo que todos callábamos. Para Ver! (Meche Martínez)

 

Dramaturgia: Lourdes InviernoJavier Rodríguez Cano

Actúan: Lourdes Invierno

Edición de sonido: Marcelo Wengrovski

Diseño De Iluminación: Laura Saban

Comunicación: Marcos Mutuverría

Diseño gráfico: Krafty Maik

Asistencia técnica: Timoteo Castagna

Prensa: Marcos Mutuverría

Producción Audiovisual: Alejandro Y Julimar

Producción general: Lourdes Invierno

Puesta en escena: Javier Rodríguez Cano

Dirección: Javier Rodríguez Cano


EL CAMARÍN DE LAS MUSAS

Mario Bravo 960 
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 4862-0655
Web: 
http://www.elcamarindelasmusas.com
Entrada: $ 18.000,00 - Jueves - 20:00 hs - Del 03/07/2025 al 28/08/2025

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